Inicio Emprendedores Raintop: Vio una tendencia y hoy la fabrica en Argentina

Raintop:
Vio una tendencia y hoy la fabrica en Argentina

Un recorrido por Barcelona frustrado por la lluvia puede parecer una de las peores cosas que te pueden pasar pero, para Pilar Atterbury, terminó siendo un gran suceso. De la ciudad no se llevó buenas fotos pero sí una gran idea que transformó en un emprendimiento exitoso: Raintop.

¿Cómo salir bajo la lluvia sin arruinar nuestra cartera o mochila y lo que llevamos dentro? Y así, con un disparador simple y concreto Pilar desarrolló su primer producto: el Bagtop, un cobertor para carteras y bolsos impermeable 100% nacional. Un producto que no se comercializaba ni en Argentina ni el resto de Latinoamérica.

Del turismo al desarrollo, en un paso.

De aquel viaje, le había quedado dando vueltas algo con la lluvia. “Recordando lo que pasó en Barcelona, me surgió la idea de hacer cobertores para carteras. Y de una investigación que hice me di cuenta que es un producto que acá en Argentina no existe ni en América latina. Sí en Europa, Estados Unidos o China. Pero traerlo importado de China no era una opción para mí, yo quería hacerlo acá”, resaltó.

“En aquel momento trabajaba en relación de dependencia  de forma home office, pero cuando fui mamá quise empezar a tener algo propio y algo que me permita adaptarme a las actividades de mi hijo”, comentó Pilar.

Ella es licenciada en Turismo. Y si bien el desarrollo del producto no fue nada fácil ya que no tenía experiencia relacionada, en el fondo se dio cuenta que había un tema pendiente en su vida. Su interés por el diseño industrial estuvo muy presente al momento de decidir qué carrera seguir. Y si bien perfiló para otro lado, la lluvia la reencontró con lo que se dio cuenta, era una pasión.

Marca nacional.

Si bien el desarrollo de productos 100 % nacional para muchas empresas no es una opción y prefieren importarlo, no era eso parte del proyecto de Pilar. “Lograr un producto competitivo a nivel local se puede. Recorrimos varios talleres y proveedores de tela. Terminamos dando con un taller que interpretó bien la idea, trabajan muy bien y además dimos con la tela ideal. Pudimos unir todo”.

“Algo también que tuvo peso en todo esto es que los cobertores de carteras que existen en otros mercados, no se adaptan a lo que quieren las mujeres de acá, que tiene otro estilo. Por tanto el desafío fue desarrollar el modelo que le guste a la mujer argentina, que es una mezcla de clásica y no tanto. No siempre lo que se trae de afuera pega acá”.

“Con todo esto, logramos un producto final con costo muy competitivo, que hasta puede competir con los de China. El precio final de mi producto se consigue en el exterior sólo para mayoristas”.

Primeras ventas.

El arranque de todo el proyecto fue en marzo y el producto salió en mayo. Hubo muchas pruebas en el medio, con aciertos y errores, hasta llegar al producto final.  Pero las ventas no llegaron tan rápido. Como es un producto que localmente no existía el primer gran desafío, fue imponerlo. Para eso, las redes sociales fueron y son el gran aliado.

“El producto sorprendía y gustaba, porque es novedoso y la gente sabe que en algún momento les va a servir. De mayo a junio, fue un trabajo de difusión pero no se vendía. Las ventas tardaron en llegar y desde julio estamos vendiendo muy bien. La venta es en forma directa, online y también con revendedores que son regalerías o locales de accesorios. Próximamente se va a empezar a ofrecer a empresas como productos de merchandising.”

Un plan que falló.

“Por las características del producto, lo primero que pensás a la hora de buscar distribuidores es en las marroquinerías. Pero no fue precisamente ahí donde pudimos instalarlo. Fue algo curioso porque lo primero que pensamos en cuanto a utilidad era proteger el cuero de las carteras, que salen caras. Sin embargo no fue por ahí el tema. Además, nos dimos cuenta que el producto se valora para todo tipo de cartera, mochila o bolso. No sólo para los más caros. El público que nos ha comprado es muy variado. Eso fue un gran descubrimiento en el día a día”.

El futuro.

Con el cobertor para carteras como primero de la serie, llegaron luego el de mochilas, celulares, con opciones en diferentes tamaños. Y la cosa no termina ahí. Ya tiene lista la cartera transparente que se proyecta como un boom para esta temporada primavera verano. “Es para la playa y también te protege de la lluvia”, resaltó Pilar.

“Muchas veces lo que pasa en el país te asusta. Pero hay que buscar dónde está la oportunidad. Me lancé en un año complicado y me va bien. Además creo que me irá mucho mejor”.

Pasada esta temporada, tienen en mente continuar la línea con nuevos y novedosos productos. “Tengo claro que no hay que quedarse y hay que innovar. Si uno se queda con lo que tiene, la gente se aburre y te deja de seguir”. Así, la lluvia de ideas, o más bien, la lluvia y las ideas, terminaron abriendo para Pilar lo que muy probablemente sea el camino para consolidar el sueño de tener su propia empresa.